“Pertenecer a food + i, nos ayuda a conocer y anticiparnos a las necesidades de las empresas en toda la cadena de valor del sector alimentario“
Señas de identidad de KUKA
KUKA es un proveedor líder mundial de robótica inteligente, tecnología de instalaciones y sistemas e impulsa la digitalización en la industria.
¿Cuáles dirías que son las señas de identidad corporativa de KUKA? ¿Sobre qué pilares se consolida vuestra propuesta de valor?
El valor añadido de KUKA está asociado a la combinación de diferentes competencias junto con un espíritu pionero. Puede tratarse de hardware, software y mecánica, o de clientes, socios y productores.
La fusión de estas diferentes competencias y ámbitos es un aspecto esencial de nuestro concepto de empresa y constituye la principal seña de identidad.
Mediante soluciones en robótica, automatización y logística, nuestra misión es hacer la vida y el trabajo más fáciles, ayudando a nuestros clientes a hacer realidad su idea dando el salto definitivo hacia una industria cada vez más conectada y digitalizada. Las empresas necesitan están preparadas para responder a los grandes retos urgentes y globales de la sociedad con un impacto sostenible y positivo.
Todas las soluciones que ofrecemos son el resultado de una larga experiencia, en este sentido este año estamos de doble aniversario.
Hace 125 años que KUKA (en 1898), de la mano de sus fundadores Johann Josef Keller y Jakob Knappich, empezó su actividad, principalmente con el negocio de la iluminación pública en las casas y posteriormente como expertos en instalaciones, soldadura, envases y contenedores.
El primer robot industrial KUKA se construyó en 1973 y fue el primero del mundo con accionamientos eléctricos. Hoy la empresa es uno de los principales fabricantes mundiales de robots industriales. Este año se cumplen también 50 años de presencia directa de KUKA en España.
¿Qué oportunidades de mercado crees que se abren en estos momentos para vuestra gama de productos?
El sector alimentario debe afrontar retos actuales como la falta de trabajadores en algunos sectores, el incremento de los costes (materias primas, energía y transporte) y adaptación al nuevo consumidor con más diversidad y nuevos productos para satisfacer los nuevos hábitos de consumo más saludables y con una mayor responsabilidad hacia el medioambiente, utilizando por ejemplo materiales de packaging sostenibles u optimizando el uso energético para reducir las emisiones.
Para esta adaptación la robótica permite dar un salto a las empresas de alimentación para ser más competitivas y estar mejor preparadas frente futuras crisis (que todavía no conocemos).
Los tiempos de parada de las líneas de producción se reducen al mínimo gracias a la robótica, que proporciona una elevada flexibilidad y agilidad e los cambios de formatos.
Otra gran ventaja de los robots es su robustez y fiabilidad, con una disponibilidad 7/24, ya que, al tratarse de un sistema digital, este proporciona una supervisión constante para anticipar posibles mantenimientos.
KUKA dispone de un amplio catálogo de robots y tecnologías que facilitan aplicaciones, liberando a los operarios de realizar tareas repetitivas o con cargas pesadas, como por ejemplo la manipulación de materiales de packaging para alimentar las líneas de envasado, agrupado de productos, estuchado o ya en el final de línea, el paletizado de cajas.
Algunos robots cuentan con características especiales para ambientes extremos como salas blancas con características higiénicas para estar directamente en contacto con los alimentos, ambientes con agua, capaces de trabajar en temperaturas extremas como -30ºC o soluciones de coexistencia que permite a los humanos trabajar junto a los robots de forma totalmente segura
¿Qué productos habéis lanzado recientemente?
Recientemente hemos ampliado nuestra gama de soluciones en robótica móvil, con un enfoque práctico a completar la robotización de las líneas, incorporando plataformas autónomas de transporte intralogístico KMP (KUKA Mobile Platform).
Esta tecnología de plataformas móviles (con o sin robot embarcados) permite organizar los recursos en los centros productivos, proporcionando la máxima versatilidad y liberación los espacios de cintas fijas de transporte terrestre o elevado, optimizando el flujo de materiales en las plantas, con origen y destino según nos convenga.
Podemos programar estas plataformas para acercar los materiales a las líneas donde estos son utilizados durante el proceso de fabricación, en combinación con el producto acabado (por ejemplo: bobinas, envases, bandejas, estuches, cajas, separadores) donde si vamos un paso más allá, otro robot puede alcanzar estos materiales y alimentar la máquina. También tienen capacidad de transportar muestras de la línea (que también puede recoger un robot) al laboratorio para su análisis.
Otra gran novedad es el nuevo sistema operativo iiQKA. Este ha sido diseñado para que la experiencia del usuario con el robot sea lo más intuitiva, potente, rápida y escalable posible, lo que permitirá a más personas, empresas y mercados, acceder e impulsar las enormes ventajas que ofrece la automatización robótica. Se trata de un cambio de paradigma generacional en el que KUKA se ha embarcado, haciendo posible que los recién llegados a la robótica imaginen y alcancen fácilmente sus objetivos de automatización, a la vez que hace que el proceso sea más rápido y eficiente para los que ya son expertos.
¿Dónde pensáis que estarán los principales retos para vuestra empresa y el sector de la robótica inteligente en los próximos años?
El gran reto de la industria de la robótica es hacer frente a los cambios en todo el mundo, bajo algunas mega tendencias que han llegado para quedarse, como por ejemplo: la facilidad de uso por parte de usuarios con poca o ninguna experiencia en programación, la necesidad de integrar robots con otros equipos mediante estándares globales de comunicación e intercambio de datos, disponer de una amplia oferta de robots con características especiales para nuevos ambientes (industriales o domésticos), entre otros.
Estamos viendo cómo se alcanzan nuevas aplicaciones que hace unos años eran impensables gracias a la integración de los robots con sensores capaces de reconocer el entorno junto con la evolución de algoritmos de aprendizaje y AI. Esto nos permitirá el uso extensivo de robots, capaces de adaptar su funcionalidad con el mínimo esfuerzo, ya que estos se adaptarán en entornos industriales, domésticos o incluso en entornos especiales donde los robots participarán y donde su principal misión, por ejemplo será salvar y evitar poner en riesgo a las personas.
Un ámbito donde veremos los robots será en los casos donde se requiera una actuación rápida frente alguna emergencia (terremotos, incendios o inundaciones).
En la industria alimentaria un buen ejemplo de ello lo encontramos en la recolección y posterior envasado de fruta, donde gracias a una cámara de visión, el robot conoce que fruta recolectar o seleccionar para su envasado en un entorno no ordenado (aquella que está en su estado óptimo), respetando al máximo su integridad durante la manipulación.
Otro sector con aplicaciones inteligentes de robótica es la medicina, donde KUKA colabora con empresas punteras desarrollando sistemas de rehabilitación, rayos x o radio terapia. En este último ámbito, gracias al sincronismo de la camilla del paciente y del cabezal, los dos sistemas basados en robots KUKA, trabajan de forma coordinada y precisa sobre un área concreta del paciente, protegiendo a otras partes de su cuerpo
KUKA y su compromiso con la innovación
Recientemente KUKA se ha incorporado como proveedor especializado a food+i
¿Cuáles son los principales beneficios de pertenecer a un entorno colaborativo como es food+i, donde se interactúa con otras empresas del sector?
Pertenecer al entorno colaborativo food+i nos ayuda a conocer, aportar soluciones en proyectos colaborativos y anticiparnos a las necesidades de las empresas en toda la cadena de valor del sector alimentario.
Las jornadas y eventos con un carácter divulgador y práctico son fuente de conocimiento y actualización constante que nos permite comprender los retos del sector, para transferirlo a nuestros departamentos de diseño para que configuren los robots que el sector necesitará en el futuro.
En definitiva, las empresas asociadas y sus personas interconectadas generan relaciones de confianza mediante el Networking y se benefician de las acciones en conjunto que se emprenden.
La sinergia y estrecha interacción entre KUKA y empresas dentro del grupo con actividades estrechamente relacionadas, proporciona mayor visibilidad, competitividad y productividad, generando un escenario óptimo para la creación de nuevos negocios o proyectos
Colaborar en un entorno tan competitivo como el que vivimos resulta un reto ¿Cuáles crees que son los principales puntos a tener en cuenta para tener una mente colaborativa?
Para tener una mente colaborativa debemos tener la capacidad de sentarnos en una mesa y compartir conocimiento del sector para generar mayor valor de una forma honesta.
La capacidad de interacción de las personas junto con herramientas colaborativas serán aspectos clave para el éxito de un proyecto común.
Muchas de las cualidades se encuadran en conceptos de trabajo en equipo, por ello me gusta cualquier método que nos ayude a recordar e identificar estos factores que nos ayudan a su implementación, como por ejemplo las 5C del trabajo en equipo: la comunicación, la coordinación, la complementariedad, la confianza y el compromiso.